Sabores y Sistemas
Es especialista en la creación de sabores a la medida de los gustos y preferencias de cada cliente, además de la fabricación y comercialización de sistemas funcionales para alimentos.
A lo largo de 45 años de trayectoria en la industria, hemos desarrollado una librería con más de 15,000 formulaciones que nos dan una capacidad ilimitada de variaciones, lo que nos permite personalizar el sabor a la medida de los gustos y preferencias de cada cliente.
- Tecnología: utilizamos tecnología de punta para estabilizar la nota e intensidad de cada sabor o para enmascarar sabores no deseados en procesos complejos que incluyen exposición a elevadas temperaturas, humedad, pH y larga vida de anaquel.
- Materias primas: damos mucha importancia a la disponibilidad de materias primas y de los componentes intermedios utilizados en la producción de nuestros sabores, manteniendo inventarios mínimos de seis meses, lo que nos da gran flexibilidad y velocidad de respuesta para atender las exigencias de los mercados local y de exportación.
- Infraestructura: en nuestra planta de fabricación contamos con la más completa y moderna infraestructura productiva, lo que nos permite disponer de la capacidad instalada necesaria para atender oportunamente todo nivel de producción, en cualquiera de nuestras líneas de productos.
Además, le ofrecemos al mercado múltiples alternativas de sistemas funcionales, los mismos que van a ayudar a mejorar las características funcionales de un producto alimenticio, y en muchos casos ayudan también a la caracterización del mismo.
Los sistemas que ofrece Montana se dividen en:
- Sistemas no saborizados: son sistemas que ayudan a desarrollar o mejorar las características funcionales de un determinado producto. Dentro de este tipo de sistemas se encuentran los sistemas estabilizantes, emulsificantes, edulcorantes, entre otros.
- Sistemas saborizados: son mezclas de ingredientes que realizan, en muchos casos, funciones similares a los sistemas descritos anteriormente, y a su vez le aportan sabor y color al producto final ayudando así a la caracterización del mismo, como por ejemplo: unidades para bebidas gaseosas, bebidas nutracéuticas, mezclas bases para productos listos para consumir, entre otros.